Nuestra Historia

Las fundadoras de la organización se conocieron trabajando en la maquila como operadoras. A pesar de su juventud, después de varios años de experimentar en carne propia el agotamiento, la persistencia de carencias a pesar de las extenuantes jornadas de trabajo, la falta de oportunidades y una serie de abusos laborales, comenzaron a reflexionar colectivamente sobre las dinámicas laborales en las que estaban inmersas. Al darse cuenta de que otras mujeres compartían experiencias similares, entendieron que no se trataban de casos aislados, sino que las condiciones laborales de las empresas permitían y reproducían situaciones que violaban lo que hoy reconocen como derechos humanos de las mujeres trabajadoras.


Desde 1995, comenzaron a buscar espacios de formación para comprender mejor cómo enfrentar sus problemas laborales. Conocieron organizaciones que luchaban por los derechos laborales cuando el tema aún era poco tratado en Ciudad Juárez. Fue entonces cuando tomaron conciencia del poder de la organización y comenzaron a exigir mejoras en sus lugares de trabajo. Paralelamente, participaron en la pastoral obrera y formaron grupos de análisis en colonias y barrios, así como en grupos de jóvenes, para reflexionar sobre las injusticias que estaban viviendo. Así, decidieron organizarse en las casas de las compañeras, sin financiamiento alguno, pero con la firme convicción de que «si hay un problema, hay que resolverlo ya».


En ese tiempo, las pocas organizaciones obreras que existían empezaron a desaparecer y las mujeres comenzaron a buscarlas a ellas para resolver dudas y buscar solución a sus problemas laborales. Fue entonces cuando se plantearon la pregunta: «¿y ahora qué vamos a hacer? Porque el problema persiste». En ese momento, decidieron asumir el papel de referentes que las trabajadoras de la ciudad necesitaban, y así nació la Colectiva de Mujeres Rosa Luxemburgo (CROL). Esta asociación civil, apartidista, plural e inclusiva con perspectiva de género, se constituyó en 2016 como respuesta a las prácticas irregulares y discriminatorias en los procesos de contratación de mujeres en la industria maquiladora, que violaban los derechos laborales en Ciudad Juárez, Chihuahua, México.


Desde su creación, el trabajo de base comunitaria con mujeres ha sido fundamental. Las personas que coordinan la CROL son mujeres trabajadoras que, a través de la organización y la resistencia pacífica, han logrado consolidar su labor, producto de la formación educativa y política adquirida a lo largo de los años generando un espacio de acompañamiento y fortalecimiento para que las mujeres trabajadoras de maquila puedan reconocerse como sujetas de derechos y mejorar la interlocución con sus empleadores. Su tarea sigue siendo garantizar el pleno ejercicio de los derechos laborales de las mujeres trabajadoras en Ciudad Juárez desde 1995 hasta la fecha.